12/27/2014

GALEATO[1] SOBRE LA PERSISTENCIA DE LO NEOLITICO Y ARGARICO EN UN ESTUDIO ETNOGRÁFICO DEL MEDIO ALMANZORA

GALEATO[1] SOBRE LA PERSISTENCIA DE LO NEOLITICO Y ARGARICO EN UN ESTUDIO ETNOGRÁFICO DEL MEDIO ALMANZORA
Por 
José Antonio GARCÍA RAMOS

De la Sociedad Española de Historia de la Medicina

Ha sido  para mi una gran sorpresa el libro que tenemos entre manos y esto me ha hecho pensar el no realizar un prólogo  al uso, pues ya en su Introducción José Miguel Carmona, joven profesor  de Albox, albojense de pura cepa, explica la finalidad de la obra. Tras  leer la introducción poco más podemos añadir de la intencionalidad del libro. Sería repetir lo que tan bien quiere expresar quien lo ha compuesto que no es  un viejo nostálgico o un curioso  de tierras foráneas que viene a “redescubrir” lo  nuestro. Trata Miguel de enseñarnos que el patrimonio etnológico de un área comprende los modos específicos de existencia material y de organización de los grupos que componen sus conocimientos, su representación del entorno y  los elementos que fundan la identidad de cada grupo social y lo que lo diferencia de los demás”.

En “Almería, tierra de cortijos”, nos hallamos  ante una obra que es necesario que exista,  porque  en ella encontramos un  caudal, mas bien una “gran catarata” de material etnográfico  de primera mano recogido  fundamentalmente en un área a caballo entre la Aljambra y el Llamo de las Animas en al municipio de Albox  de donde son los abuelos, bisabuelos y tatarabuelos  y los  familiares del autor. Se trata y así lo veremos en el futuro de   un libro  imprescindible para el conocimiento etnográfico de Albox y del  Medio Almanzora que marcará época en el estudio del costumbrismo de nuestra comarca. Viene el libro a llenar un vacío muy importante sobre  el  conocimiento de nuestra cultura popular y creo que puede ser el último que llegue a realizarse con tanto entusiasmo sobre éste tema.

Nos hallamos pues ante  un oportuno y extenso trabajo de campo, sobre un área de las más ricas  e inéditas de toda la Península. Esta riqueza cultural de Almería viene dada históricamente por su situación frente al mediterráneo a través de donde nos llegan desde hace milenios, aires de la cultura neolítica, argárica, oriental, clásica, islámica y de la Europa medieval. El estudio teórico de Albox   como totalidad, enriquecería a la provincia estudiada en conjunto y dejaría estudiadas o iniciadas en su estudio a localidades  limítrofes, algunas ignoradas al respecto. Albox desde el punto de vista de la antropología cultural, es un área puente entre la Andalucía tradicional y el Levante, que se imbrica indudablemente con las áreas vecinas de Murcia y Andalucía.

 Estratégicamente situada dentro del área mediterránea occidental (hablamos de Almería), su enclave geográfico ha supuesto que sobre su “suelo cultural”--suelo primitivo que de un modo abstracto podría llamarse el “Todo Neolítico”--se hayan ido sedimentando aquellos sucesivos estratos  culturales de quienes nos fueron visitando en las distintas etapas de la historia. Estas culturas  modificaron en mayor o menor grado ese “Todo” afecto al suelo semidesértico, a la tierra inamovible. Constatar la presencia perenne o persistencia de ese “Todo Cultural” almeriense dentro del contexto más amplio de un Mediterráneo occidental cuna de las civilizaciones, mediante los elementos etnográficos que persisten en los medios rurales estudiados en nuestra provincia por Miguel, es otra de las aportaciones y objetivos importantes  de este trabajo.

El “cortijo antropológico” (idea del libro) nos ofrece un  caudal abundante de material lingüístico: refranes, coplas y coplillas, dichos, y palabras en peligro de extinción.

Resulta  valioso también éste  libro en la descripción y rescate de muchísimos aspectos de la cultura material del área objeto de estudio de los que yo he seleccionado por sus connotaciones prehistóricas entre otros  muchos los siguientes

Aljibes y cultura del la agua No se entienden los cortijos o cortijadas, hasta que no llegó el agua potable, sin un pozo y/o un aljibe. Se sabe que por nuestras tierras  ya existían aljibes en la cultura argárica, hace ya 3.600 años. Los aljibes son de una planta rectangular, alargados y cubiertos por una bóveda: los hay argáricos, romanos, árabes y modernos (Por cierto que recientemente se destruyó en la Aljambra donde  se han recogido la mayoría de los datos de este libro un precioso aljibe árabe).

Los navajos, otro hallazgo original y procedimiento también de tintes neolíticos o prehistóricos. Un “navajo” es un  hoyo artificial hecho en la tierra sin ningún revestimiento que embalsa el agua de lluvia y se usa luego para abastecer de agua los pastores y como abrevadero del ganado.

De la alimentación destacan las migas como rito comensal, la elaboración del pan: magistral descripción sacada del magnifico pan que hacia hasta hace bien poco la abuela del autor. La  matanza, forma de conservar  la carne del cerdo aprovechada en su integridad sin necesidad de  frigoríficos y como rito comensal de convivencia.

Y si no la cuajada del pastor o el bombón de los pobres con almendras e higos metidos en una caña

Curioso es  recoger el dato original de los enterramientos de los niños que nacían muertos, enterrados en el suelo de las casas como hacían los hombres argáricos.

Y entre  los ritos mortuorios, dos puntos son clave: el funeral (dispone del cuerpo y separa del mismo al espíritu) y el luto (que aísla a los parientes para reincorporarlos luego a la comunidad con nuevas relaciones)”

Y en el campo que más conozco que es el de la Medicina Popular aparece en el libro la constante cultural y la persistencia de los remedios populares (animales, minerales y plantas)  en el entorno geográfico  en que se asienta Albox, en infinidad de afecciones hasta el siglo XX. Se une en su descripción  la enorme relación que existe entre las formas de medicina (popular o primitiva) con las creencias sobrenaturales

De las múltiples referencias a la espartería y a su elaboración, cestos, paneros, esparteñas, sacos, tomizas, guitas, sogas, sobrecargas... destaco la descripción del curioso Cachulero (recipiente para recoger los caracoles del campo)  donde se entrelaza  la nutrologia con la cultura de supervivencia
Hay otros más.

Señalar por fin el regalo en el libro, de la recopilación de un  Material fotográfico abundantísimo de primera mano.

Hay que tratar de sacar varias enseñanzas de éste libro

-La obra de José  Miguel esta hecha desde el amor a su tierra y la intuición y oportunismo de no perder la ocasión de salvar algo que necesariamente se iba a perder y que con este libro lo hemos rescatado, afortunadamente.

-Esa economía de subsistencia, crea  unos elementos culturales y festivos en torno al nacimiento, infancia noviazgo, casamiento, relaciones interpersonales e intrafamiliares y muerte que  no deben se; de ahí el subtítulo de “Nuestros familiares en el campo almeriense”

-Volver a la economía sostenible sería una forma muy provechosa de reformar la sociedad.

 -Ninguna cultura se puede preservar pero si se puede “conservar” a través de su conocimiento,  y el conocimiento  de la diversidad cultural de la zona de Albox en los cien últimos años, se plasma en una  obra difícilmente superable para el área estudiada.

- José Miguel lanza en el libro un   mensaje a los de su generación: los jóvenes a quien podríamos preguntar ¿Hemos avanzado o  hemos retrocedido?  Los “señoritos” o urbanitas (que eran  los menos) se van a quedar  fuera de traste en la sociedad actual? Aquellos “los cortijeros” ¿eran los verdaderamente ricos tal como los muestra José Miguel?

 -Lo que si es verdad es que con  esa vocación, el autor  ha aceptado y superado  el reto de elaborar el presente estudio, que no pretende otra cosa que exponer, en qué consiste el Patrimonio Cultural de Albox...y de Almería  que se debe aspirar a conservar y transmitir.

Y estoy seguro que en su pensamiento profundo, José  Miguel Carmona, Martos, García, López, Martínez y otros... creo que recapacita que aquellos que vivían de aquella manera, son los verdaderos sabios: con  una forma de vida económica y espiritualmente  más rentables...

Al terminar de releer el libro: esa es su filosofía (y la mía)




[1] Del prólogo o epilogo  de una obra, en que se la defiende de objeciones y reparos.

10/08/2014

LA VACUNA DEL VIRUS EBOLA (DE LA MUERTE..).

LA VACUNA DE LA MUERTE



“Si te juzgas pagado lo bastante con la felicidad de la que acaba de ser madre; con la cara que sonríe porque ya no padece; con la paz del moribundo a quien ocultas la llegada de la muerte; si ansías conocer al hombre y penetrar en lo trágico de su destino..¡Hazte médico, hijo mío!”



En un mundo libre, utópico, no libre de hipocondríacos, a una multinacional farmacéutica, se le ocurre inventar la vacuna deL ËBOLA (de  la muerte,) la vacuna contra la muerte, la panacea total. Pero las unidades son limitadas. La lucha para conseguirla es inmensamente brutal.

Era solo un sueño.

Sientes pasión por la verdad; ya no podrás decirla. Tendrás que ocultar a algunos la gravedad de su mal; a otros su insignificancia, pues les molestaría. Habrás de ocultar secretos que posees, consentir en parecer burlado, ignorante, cómplice.



Eso de Salud para todos en el Año 2000 no ha dejado de convertirse en una falacia política, pues la muerte es inevitable y la enfermedad insoslayable. Más bien, estamos entrando en la autodestrucción no solo del individuo, sino de toda la especie humana y de su propio ecosistema.

La muerte (un acontecimiento indeclinable) y la enfermedad, jugarán al ajedrez más o menos tiempo, como ocurre en la película “El Séptimo Sello”.Al final, siempre será la muerte la que ha de ganar la partida. Fue un hombre que dudaba de su fe, al que la parca gana la partida de ajedrez donde se jugaban la vida.

“La idea de la película, que se sitúa en la Suecia Medieval durante la peste, procede de los frescos medievales que muestra a la Muerte jugando al ajedrez con sus víctimas. Ahí está el caballero (Max von Sydow), que vuelve a casa después de las Cruzadas acompañado de su escudero (Gunnar Björmstrand), cínico y realista. Entonces procede a interrogarse sobre Dios y el significado de la vida ante las burlas de su escudero. Se encuentra con la Muerte y le pide un plazo para resolver sus dudas iniciando un viaje a través del conocimiento aunque cada noche deba jugar al ajedrez con ella”.



El concepto que tiene la población, de que la muerte es el fracaso de la ciencia o de la tecnología es un error grave. Será la muerte la que siempre ha de ganar la partida a la ciencia, porque el “status naturae purae” no ha llegado nunca a tener realidad histórica (Lain Entralgo). La muerte es el destino inevitable del hombre...la finitud, la única verdad.

"Si hay que destacar algo del film es la reflexión que nos muestra al final: sólo la muerte es certera en la vida y ella es la única que nos hace iguales. Ricos-pobres, nobles-plebeyos, todos vais a morir y ante ella no existe distinción".http://www.youtube.com/watch?v=rrm2AFsM49U&feature=related
Es una realidad incuestionable parafraseando al ilustre clínico decimonónico Valera de Montes “La terapéutica es la ciencia que siembra de flores el camino hacia la tumba”.
La ciencia es una servidora de la muerte. Alarga la vida. Palia el sufrimiento a veces lo prolonga...no la evita definitivamente.

Fundamentado en el utópico “derecho a la salud”, que se confunde hasta por la ministra de Sanidad de turno con el derecho a alcanzar la salud con los medios que el estado pone a nuestro alcance de forma gratuita, que es lo que dice la Constitución, los políticos de inspiración colectivista, conciben la medicina –esa nuestra sagrada ciencia- con un lenguaje CARIBEÑO (muchos de nosotros hemos recibido cursillos de “medicina cubana”) y TRASNOCHADO, como una “empresa de servicios”, con “proveedores” y “clientes” con “recursos húmanos” y con un “particular mercado que pretende solamente “calidad de servicio”.

La muerte, siempre (secularmente) vencerá a la ciencia (globalmente) en la partida de ajedrez. No existe ni existirá por desgracia para los panhedonistas, la tan cacareada “Vacuna de la muerte”

Tu vida transcurrirá como la sombra de la muerte, entre el dolor de los cuerpos y de las almas, entre los duelos y la hipocresía que calcula a la cabecera de los agonizantes; la raza humana es un Prometeo desgarrado por los buitres.


La vacuna de la muerte no se logrará porque no se puede siempre evitar la muerte o curar. Creyendo el mito de que se puede acabar constantemente con el sufrimiento y la enfermedad, retardando cada vez más la muerte, la medicina no ha cumplido sus promesas y la gente sigue muriendo y sufriendo en una sociedad vacía, somatizada, medicalizada, pésimamente informada .Todo esto genera una demanda insaciable de servicios médicos por parte de individuos tanto más descontentos del sistema, cuanto éste más ofrece .Tal es la dependencia del sistema médico, que se vive en la creencia de que se puede resolver de inmediato cualquier problema clínico que surja desde la cuna hasta la tumba. Todo es urgente. Toda afección banal se magnifica como una urgencia. Y aquello que se magnifica y no es atendido de inmediato o como la televisión desea, es objeto de querellas criminales contra los empleados del sistema que es quien permite estos absurdos.

Vivimos en una sociedad llena de miedos y de fobias, vacua de cultura, sin el menor aguante ante la realidad de la enfermación y de la muerte.

Lejos de la Madre Naturaleza los hombres viven obsesionados  por no morir (“morirse en paz” se ha convertido en un proceso anticuado o suicida), la medicina se apropia del moribundo o del enfermo terminal (con la complacencia y liberación de conciencia de los familiares) y le encarcela en una UVI; le introduce sondas y catéteres para hacerle vivir unas horas o unos días más con la pretensión de que se muera “muy mejorado”- o por el contrario que se muera pronto o con "sedación paliativa"  o así prolongar a menudo su agonía y sus amarguras. Más que curar lo que se consigue así, es prolongar sufrimientos, padecimientos y angustias.
Tal es el objetivo de la VACUNA DEL EBOLA ( de la MUERTE.)

9/06/2014

El médico paremiólogo


      
    
          
    El médico paremiólogo

Fue el grupo de pop torero Gabinete Caligari quien en los años ochenta cantaba el estribillo no quiero escuchar mas malditos refranes». Esta afirmación tiene su
contrapartida, como casi todos los temas del saber. Y es que, mas que la sabiduría popular, la mayoría de los refranes, los dichos o frases sentenciosas anónimas de este
Refranerillo  almeriense representan el haz y el envés de un pueblo, de una comarca, de una tierra.
El médico albojense José Antonio García Ramos ha trabajado durante décadas, con paciencia de orfebre, en la compilación  de refranes de la provincia de Almería que ha oído, recogido, anotado y comentado de manera altruista para, al fin, eternizados en las paginas de este libro. El autor se muestra humilde y modesto al declarar que no es paremiólogo, pero ha actuado como un verdadero trabajador intachable de la lingüística, convirtiéndose en ejemplo a seguir para cualquier aficionado a esta
ciencia, a menudo desprestigiada por las altas esferas académicas.
Ese altruismo del que hablamos no resta un ápice de profesionalidad a la hora de programar el basto material acumulado en años. El respetado doctor García Ramos lo
ha hecho por orden temático y ha dado er1 el centro de la diana, ya que el lector no especializado podrá gozar de los refranes que mas le interesen en principio. Luego, ese
mismo lector, casi sin darse cuenta, comprobara que ha pasado todas las páginas del libro y le ha sabido a poco, quiere más refranes, desea alimentar más aun su curiosidad. Esa sensación despertada en las personas que leen un libro es el mayor regalo que puede obtener un escritor.
Pongamos algunos ejemplos de ese logro, como escaparate para los que deseen disfrutarlo.
Encontramos simultáneamente la crueldad y la benevolencia de los dichos, rumores meramente informativos y otros rumores tan dañinos a veces “Cuando  el río suena  agua lleva” que consiguen estigmatizar a sus victimas de por vida. Hasta el más escéptico de los espectadores de un rumor esta preso de la información venenosa del mismo.
Vamos a localizar refranes que, por las circunstancias socioeconómicas e inmigratorias de la provincia actualmente, han quedado temáticamente obsoletos: “No hay viejo que no sea valiente, ni extranjero de mala gente». Recuerdan cuando en la película de José Luís Cuerda “Amanece  que no es poco” aparecía un negro caminando por las calles de un pueblo como personaje extraordinario? Un símbolo de la leyenda latina: Verba volant, scripta manent, y  García Ramos se encarga de que esas frases llenas de viejas certezas no se pierdan en el olvido de la oralidad. Por ello, este libro tiene tintes optimistas de arqueología del lenguaje. En otras paginas hallamos joyas populares de
JUAN DE DIOS GARCÍA GÓMEZ
Olula que hacen referencia a personajes concretos como el de “Llueve más que cuando enterraron a Bigotes” o lugares conocidos estrictamente en el pueblo de donde nacen como el del cementerio de Abla. que reza “Está con un píe aquí y otro en Los Santos”. Hay refranes producto de tensiones políticas provinentes de la etapa en que se definieron las autonomías “ Almería es de Levante, no de Andalucía”;   refranes pesimistas “Pa poca salud, mejor ninguna”; refranes que dictaminan: “Dios castiga y no da voces”, que desnudan algunas verdades domésticas “La suegra y las nueras no caben en una era, la madre y la hija, caben en una camisa”,refranes burlones  o escatológicos que tratan de humillar a una localidad o a sus habitantes por el hecho de haber existido una antigua histórica  manía personal de una alta autoridad o  una rivalidad  general crecida durante los siglos de un pueblo; como “El más tonto de Albox, es abogado en Lorca” o “En Adra, la que no esputa, ladra
Existe en España un mejor sentido de la ironía. La autocrítica y el chiste que el de los andaluces? Es poco discutible la respuesta negativa. El tópico de la vagancia  perdurará “Si el trabajo es salud, viva la tuberculosis”
Desde Taberno nos llega la pobreza y el hambre sufridas en el campesinado almeriense de la postguerra: “Un huevo  pa siete y sobró huevo”. Pero de los trabajos y de  la gastronomía campestres también salen contundentes e ingeniosas ideas: “No hay mejor arriero que la mosca”; “El  que migas quiera comer, el brazo le ha de doler
Había maneras de entender la sociedad que ya no se siguen conservando en la mayoría de los lugares de nuestro país; .aunque no dejen de ser el resumen del pensamiento burgués de otras épocas: “Las mozas, para casarlas, menearlas”
Seria posible pasar días exponiendo las gracietas  y la  diversión asegurada que contiene este libro con momentos de helada seriedad, dependiendo del refrán que se escoja, aunque seria mas apropiado que cada uno lo compruebe por si mismo. No tiene desperdicio alguno. Se lo aseguro.
Yo, que escribo esta reseña, tengo unos orgullosos orígenes familiares arraigados con fuerza en la cuenca del Almanzora. Siempre he escuchado de mis padres este dicho: “Cuando Colón  descubrió  América, ya había allí uno de Albox
 vendiendo quincallas». El sabio albojense García Ramos ha conseguido algo poderoso: se tardara mucho tiempo en leer otro refranero sobre la provincia de Almería
que iguale o supere al que él ha publicado.

JUAN DE DIOS GARCÍA GÓMEZ es el autor de ésta reseña



7/24/2014

ESCRITOS DE MIS PRÓJIMOS (1) VICTOR AZAGRA MURILLO (1922-2014)


ESCRITOS DE MIS PRÓJIMOS (1) VICTOR  AZAGRA MURILLO (1922-2014)



Escritor aragonés afincado en Albox
Ha fallecido hoy.
Hombre de gran simpatía y humanidad, amigo de todos, terciario de la Orden Franciscana, y autor de innumerables libros y artículos periodísticos-







PRÓLOGO AL REFRANERILLO ALMERIENSE DE JOSE ANTONIO GARCÍA RAMOS EDITADO EN 2005

Ya pasados los ochenta años de su existencia, creía este humilde<> que nadie le pediría que escribiese nada menos que una Introducción, exordio o prologo para libro alguno; pero he aquí que
Una tarde hube de presentarme en la consulta de mi médico de cabecera para que me recetase un aerosol para mis vías respiratorias, que  y el galeno recetante, tras rellenar la receta con el medicamento para la farmacia, mi junto con el borrador de su obra y me pide (a mi!) que le escriba el Prologo de aquel libro titulado Refranerillo Almeriense, recogido por él, que por sus trabajos literarios es miembro del Instituto de Estudios Almerienses y de la Sociedad Española de Historia de la Medicina, autor de varias obras aparecidas en prestigiosas publicaciones:“Datos originales del folklore médico almeriense”, “Plantas que curan en Albox y el valle del Almanzora”, “Refranerillo medico del Almanzora”, “Medicina popular en Almería», “Vocabulario popular de términos médicos oídos en la provincia de Almería” “Médicos Almerienses  de los siglos XVI y XVIII”,” Médicos Almerienses del siglo
XIX, etc.

La petición del Dr. García Ramos entraña, por su parte, un exceso de benevolencia y de modestia, y el aceptar tal encargo supone para este escritor baturro la carencia de esta virtud porque, en un trabajo tan exquisito y sutil como el llevado a cabo por el ilustre
Medico de Albox (Almería), entraña, como digo, indudable e imperdonable presunción; pero al recoger el borrador del libro no me atreví a desairarle a riesgo de que me dijesen con razón: <te has metido, maño>>.Decía el ingenioso Hidalgo de La Mancha a su fiel escudero Sancho Panza: <>, y el Dr. García Ramos pase a ratos mas de veinte años recolectando los refranes que*escuchaba por los pueblos almerienses, formando sin prisa esta obra de refranes porque, como el mismo dice en la introducción del libre:<

El refranero español es un espejo de la mentalidad de las gentes sencillas que ven como el mundo se desarrolla sobre cientos de anécdotas que se transmiten de generación en generación. La Real Academia de la Historia nos dice que el refrán es; <>, El refrán, que es sin duda la mas sencilla manifestación del arte popular, existe en todos los idiomas y ha existido en todas las épocas y lugares. Ya lo dijo la musa popular:

El campo tiene sus flores
y sus estrellas el cielo,
y sus arenas los mares
y sus refranes el pueblo.

En las antiguas canciones medievales, los trovadores, aquellos poetas de la Edad Media que trovaban en lengua de oc (llamada también provenzal o lemosin), en sus canciones amorosas solían introducir estribillos o secuencias poéticas que llamaron <>, y
este es el origen de la palabra refrán, pues resulta muy difícil averiguar en que consiste un refrain y cuales son sus diferencias respecto a la sentencia, el proverbio o la moraleja.
De los viejos refranes que el Dr. García Ramos nos recuerda en su libro, algunos de ellos están en uso y se escuchan con gran frecuencia en otras regiones españolas y no por ello dejan de ser originales- Nos viene a la memoria un dueto que escribieron los hermanos Serafín y Joaquín Álvarez Quintero en su zarzuela La patria chica, a la que puso música el maestro don Ruperto Chapi, en el que una andaluza, Pastora, y un aragonés, Mariano,

Ambos se enzarzan en una disputa porque el maño canta:


Yo bendigo a todas horas –
la tierra donde nací...

Y la andaluza, Pastora, le interrumpe diciendo:

“ Eso es de mi tierra!
 No, que es de la mía!
 Siempre se ha cantao
 por mii Andalusia!


A lo que el maño, baturro, aragonés, Mariano, le replica:

“Pues, en Zaragoza,
ya la escucharía!

Y no digamos nada de las puyas, dimes y diretes que se lanzan los de un pueblo a los de otro; no solamente en la provincia  almeriense, siuo en toda España. Yo he escuchado no pocos y el autor de este Refranerillo almeriense nos recuerda aquel que cautan los comarcanos del Almanzora:

En Cantoria esta la gloria,
en Fines el primer cielo,
en  Olula  el Purgatorio
y en Macael el Infierno. ·


Víctor  AZAGRA MURILLO



6/24/2014

¿ES LA ATENCIÓN PRIMARIA EN ESPAÑA UNA “MEDICINA BLANDA (LIGHT)”?

¿ES LA ATENCIÓN PRIMARIA EN ESPAÑA UNA “MEDICINA BLANDA (LIGHT)”?

El fundamento de la medicina antropológica es el tiempo, la parsimonia. Esto ha desaparecido. La medicina socializada de hoy, forzando a los médicos a consagrar pocos minutos a cada enfermo, no escamotea la realidad más interesante y más profunda de la clínica”


Se han convertido en el siglo XXI, algunos “Centros de Salud” y las llamadas “Unidades de Gestión Clínica” en algo parecido a factorías soviéticas o empresas de servicios con una filosofía que pretende aspirar al “éxito de la industria japonesa de las últimas décadas”.
Se les llama también “Unidades de gestión” que se convierten en laboratorios de “riesgo médico” o en unidades que no hacen más que medicina banal o generan ese “riesgo médico”, que sería “el efecto que la propia medicina tendría por su propia causa, a expensas de buscar efectos positivos, consecuencias negativas y nocivas”. El riesgo médico antes, concernía únicamente al individuo...

En estos centros de salud, inspirados en la medicina cubana, hay al menos ocho empleados que pueden actuar antes que el médico visite al enfermo. El enfermo va de allá para acá en torno a una burocracia la más de las veces innecesaria (la burocracia origina más burocracia o "burrocracia"o “gerentocracia”). La administración cuasi totalitaria, se preocupa más por la llamada “calidad de servicios” que del mal y de la angustia del enfermo; enfermo que acude a un médico que actúa con prisa o falta de tiempo y que omite hacer una anamnesia seriada y profunda o una exploración física exhaustiva. Primera causa de la malpraxis. No existe la competencia leal entre los profesionales que solo desean ser como el de al lado, aunque este sea un incompetente. No hay estímulos para que sean mejores. Todos son igualados pero hacia abajo.

La sanidad es un monopolio estatal que gasta mucho más que lo necesario por culpa de la prisa..Los ahora llamados “proveedores de servicios” (médicos y enfermeros) están o le hacen estar preocupados por la llamada”calidad de servicios”cuando la calidad es inherente al arte médico pues como todo arte, incluye “per se” la calidad. Es un modelo lleno de "clases pasivas del sistema que vigilan y controlan a los demás y luego así mismos en una espiral interminable".Los gestores de hoy, por un desprecio positivoide o más bien por una ignorancia de nuestra verdadera historia (la Historia de la Medicina) “redescubren” el concepto de “calidad” aplicada a la medicina a partir de un lenguaje lleno de términos vacuos.

Quieren resucitar la “calidad” los mismos que han matado con sus criterios, materialistas y economicistas, el eximio “arte de curar”
Esta terminología está llena de consignas del proletariado o fascistoides, que  intentan convertir a los médicos servidores del eximio “arte de curar”, en obreros domesticados. Consignas dadas o formuladas por los llamados “cargos intermedios”. Estos “comisarios políticos” o “jefes de escuadra”del partido de turno, y así lo piensa Bagán Mezquita “implantados por la manipulable fórmula de la designación digital (a dedo) que trasforma al gestor en “Director/Comisario Político en cada uno de los centros de salud”—se comportan como el capataz de una mina o el encargado de una obra midiendo a todos los profesionales, sean del rango que sean: médicos, enfermeros, celadores, administrativos...por el mismo rasero. Y a veces obligan a los facultativos, titulados superiores con vocación y décadas de buen quehacer médico y honrado ejercicio, considerados por la sociedad (fuera de la factoría-oficina-cárcel o Centro de Salud) como hombres y mujeres de respeto, a practicar una “medicina de mercado” parecida al dar un servicio similar al de algunos restaurantes de comida rápida “comida basura-medicina-basura), donde lo primero sería el beneficio económico y no la solución de los problemas del enfermo, ahora mero “cliente” o “usuario” a cargo del “personal” del centro de salud o del hospital: “la empresa proveedora”.Efectivamente, consiguen modular el buen quehacer médico desviándolo de su verdadera esencia: el arte , “el arte de curar”.
Los gestores de una escala superior actúan como “comerciales” expertos en “marketing”que nada tienen que ver esencialmente con la realidad asistencial que a diario enfrentamos los médicos prácticos. Los he visto reírse de quien en una de sus reuniones borreguiles se les ocurrió decir que la medicina es un arte. Ellos, que solo tienen responsabilidades políticas y consignas dañinas para los enfermos, por economicistas. También los he visto y sufrido efectuándonos reiteradas “reuniones”coercitivas en las que se nos insta o se nos obliga a recetar siempre lo más barato. Son reuniones donde el más sereno se siente vilipendiado, humillado y falto de la más elemental dignidad.”  Es necesario que los médicos "diseñen, definan y establezcan su propio estilo” El no ser así  que lo sepan, se puede volver en su contra.
Hemos pasado los médicos de ser artistas, a pretender ser científicos, de ahí a “profesionales”cuando no “trabajadores de la salud” o a meros “recursos humanos”.Somos complacientes, sumisos y a veces rastreros (ocurre así cuando nos pegan, agreden y ahora NOS MATAN en las consultas (Doctora Eugenia en Caravaca)
Somos borregos laboriosos o idiotas laboriosos. El sistema trata de hacer un “médico ligth” que no cree problemas.Lo han conseguido?
Y lo triste de esto es que a corto plazo ya no tiene remedio

INSOSTENIBILIDAD ECONÓMICA DEL SISTEMA SANITARIO PÚBLICO

LA  INSOSTENIBILIDAD ECONÓMICA DEL SISTEMA SANITARIO PÚBLICO

“Con mucha más frecuencia la medicina se impone al individuo enfermo, o no, como acto de autoridad” (Focault)

"El control de la sociedad sobre los individuos no se opera simplemente por la conciencia o por la ideología sino que se ejerce en el cuerpo, con el cuerpo. Para la sociedad capitalista lo importante era lo biológico, lo somático, lo corporal antes que nada. El cuerpo es una realidad biopolítica: la medicina es una estrategia biopolítica."


El Estado o Sistema está obligado a absorber un monstruoso y caótico aumento de la demanda de salud, a base da gastar billones de pesetas que proceden de los contribuyentes, sin ser capaz de aumentar proporcionalmente la eficacia ni mejorar los parámetros de salud. Parece que solo se limita a ver como se infla la bola del gasto hasta límites insospechados, sin saber como se puede reducir el dispendio.

Gran parte de la población es dependiente de la medicina en su vida cotidiana y previsiones individuales.

El excesivo empleo de diagnóstico tecnológico hace olvidar al médico, la realidad humana del enfermo.

El enfermo es cronificado (“personas crónicas” les ha llamado recientemente la doctora Montero, consejera de la cosa) por el sistema sanitario y por lo mismo, se convierte en un “coste”, o sea, en un ente material que gasta. La vejación del enfermo en su dignidad ha llegado al máximo...Una vez que el enfermo es un “ente que gasta” y es cronificado, se le aparca ya como un número en la llamada “Historia de salud digital”(antiguamente llamada Historia Clínica) como un irrecuperable generador constante de gastos o de “costes”.El enfermo, que es quien sufre, es un “ente financiero”.El “equipo de implicados” se encargará en adelante de mantenerlo cronificado, como “persona crónica” como pluripatólogico o polimedicado o dentro de un “proceso” irreversible hasta la muerte, pero esto sí obligando al médico a gastar lo mínimo en él.

Cuando estos enfermos crónicos que solo suponen el 5% del total generan el 50% del gasto sanitario por una mala gestión de sus enfermedades, por una “atención descontrolada o poco reglada”, el enfermo, que no deja de ser una persona que sufre, que padece, que tiene alma, es convertido o conceptuado por el sistema como un “ente material que gasta” objeto de la más baja especulación económica: y que por tanto ¿sobra?
Adquirir un cuerpo sano o perfecto denota un afán de consumismo y tecnologías nuevas, potentes medios de diagnóstico y tratamiento que contribuyen sino a enfermar, si a hacerle dependiente de la medicina hasta la muerte.

Se piensa y se difunde que se puede curar hasta lo incurable, en lugar de ir generando una cultura sanitaria serena y madura preocupada por prevenir la enfermedad y mantener responsablemente la propia salud “dispuesta a evitar enfermedades curables y la muerte prematura, pero también a cuidar de los que no pueden curarse y preparada para velar por una muerte en paz”

Ha sido un peligro para los enfermos y un gran perjuicio para los contribuyentes, esta medicina colectivista llamada al fracaso como fracasaron otros sectores económicos en los países del Este.

Se emplea mucha farmacología inútil no menos innecesaria, como poco indicada. Se emplea mucha medicación por causa de ejercerse una medicina superficial, regida por la prisa o por la desidia. Hay que tener en cuenta la poca o nula correspondiente relación científica entre muchos o la mayoría de los fármacos que se emplean en las consultas y el proceso patológico que tiene el paciente. Los antibióticos, valgan como ejemplo de otros muchos disparates médicos, en el ochenta o noventa por ciento de los casos no están científicamente indicados para una enfermedad bacteriana demostrada y sin embargo se prescriben alegremente y muchas veces en automedicación, que luego se intenta “pasar” por la Seguridad Social.

Son empleados los antibióticos y antibacterianos en procesos febriles o febrículas de origen vírico o indeterminado, en faringitis leves, en resfriados comunes, en dosis insuficientes y en un tiempo irracional. Se emplean para procesos banales que no debían de ocupar las consultas de atención primaria. Se toma al día en España más de una tonelada de antibióticos a cargo de la Seguridad Social que cuestan millones de euros diarios (supera en mucho, todos los sueldos de todos los médicos de España en un día). “La cobertura bacilar y vírica, que constituye un riesgo pero al mismo tiempo una protección para el organismo, con la que funcionó hasta entonces, sufre una alteración por la intervención terapéutica y queda sujeta a ataques contra los que el organismo estaba protegido”(Focault).

Pero esto no solo ocurre con los antibióticos. En los servicios de urgencias de primaria a donde el médico, generalmente, también ante procesos banales que sospechan infección, siempre y salvo raras excepciones, suelta del botiquín de urgencia, un antibiótico junto al analgésico-antitérmico de turno .Son dos o tres cápsulas o sobres, de ese antibiótico que más resistencias ha creado. El médico actúa sin saber el origen vírico o bacteriano o de otro tipo, que tiene el proceso febril o la simple inflamación.

Se derrochan grandes cantidades de capital en estos “servicios de salud” donde “producción y consumo” son inseparables.

Mucho más rentable sería la “metódica consideración del diagnóstico y tratamiento del enfermo conforme a su condición de persona y no solo donde el punto de vista de su reducción a mero organismo”(Laín Entralgo).

El enfermo es considerado por la medicina pública española, como un mero “cliente”(antes paciente: del griego patior : sufrimiento) afecto de un “problema de salud”(antes enfermedad) que hay que resolver en una “entrevista”(antes consulta) en la que la mayoría de las veces se olvida aplicar el arte médico y el humanismo en el trato o una correcta y pausada anamnesis y exploración física detallada.

Para curar nada, gastar mucho en “resolución de problemas banales” que por recelo (medicina defensiva) genera gastos enormes como ocurre en Estados Unidos. Por desmotivación, o por ignorancia filosófica de los principios hipocráticos, se tratan éstos problemas banales como casos trascendentes. Esta multitud de problemas banales generados por una demanda desmedida de bienestar que no de salud, estos problemas banales surgidos de la gran ausencia de educación sanitaria, masifican las consultas de atención primaria y las urgencias hospitalarias: cuando en éstas (en especial en la primaria) debía primarse la verdadera semiología (manifestaciones objetivas de un estado patológico fácilmente observable) que es el alfa y el omega de la verdadera medicina.

Hay – y esto es otro de los pensamientos en que se basa la medicina neohipocrática - una exigencia de una máxima individualización clínica llevada hasta la personalización que previene frente a una aspiración cifrada únicamente en la perfección del diagnóstico o en tratamientos meramente específicos. Hay que luchar “contra el espejismo de creer que sean solo los medios técnicos los que proporcionan por sí calidad acto médico”

Dice Marañón “Se pierde el recto rumbo de la Medicina cuando sus servidores -llámense sistemas fisiológicos o criterios morfológicos o etiológicos, o técnicas de investigación- se convierten de esclavos en tiranos” http://blogderozman.wordpress.com/2008/12/09/sostenibilidad-del-sistema-sanitario/
http://www.minutodigital.com/actualidad2/2009/11/16/ramon-forn-el-actual-sistema-sanitario-publico-espanol-es-insostenible/
http://blogderozman.wordpress.com/2008/12/09/sostenibilidad-del-sistema-sanitario/http://www.diariodeibiza.es/opinion/2009/12/23/opinion-sistema-sanitario-insostenible/381214.html

6/13/2014

MEDICINA Y PODER ECLESIÁSTICO EN LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XVIII. LA OBRA HIDROLÓGICA DEL MÉDICO ANTONIO ABELLÁN (1772) Y LA OBRA BENÉFICA DEL OBISPO CLAUDIO SANZ Y TORRES (1704-1779)

                                   
MEDICINA Y PODER ECLESIÁSTICO EN LA SEGUNDA MITAD  DEL SIGLO XVIII. LA OBRA HIDROLÓGICA DEL MÉDICO ANTONIO  ABELLÁN (1772) Y LA OBRA  BENÉFICA DEL OBISPO CLAUDIO SANZ Y TORRES (1704-1779) 

                       
                 José Antonio García Ramos
                                                    SEHM. Almería
XVI CONGRESO DE HISTORIA DE LA MEDICINA. MADRID,1 DE JUNIO DE 2014

   Es indudable que el poder de la iglesia se manifiesta en España  durante la segunda mitad del siglo XVIII de manera compleja en diversos y variados modos, encontrando en la sanidad - montando un complejo sistema de beneficencia - una de sus expresiones más lúcidas
     En la diócesis  de Almería  el  poder   político  del estamento seglar -por falta de recursos,  o porque la norma política, así lo estimaba--se desentiende de unas labores que  debieron  serle propias, como  la construcción, mejora  o sostenimiento de los edificios destinados a la sanidad
   Diferencian en este aspecto la labor eclesiástica de la labor del poder civil,  las actuaciones llevadas a cabo por  un obispo de Almería  Claudio Sanz y Torres (1704-1779) (1, 2)  “obispo ilustrado” que  durante su pontificado, impulsó una labor reformista  mediante  el desarrollo de numerosas obras sociales. La iglesia de Almería desarrolló una extensa labor asistencial en lo relativo a  hospitales, hospicios, casas de de expósitos y baños medicinales. Eran misiones  todas, que  rebasaban ampliamente el campo religioso como  la restauración de los Baños de Sierra  Alhamilla (3)  propiciada a instancias del  medico Antonio ABELLÁN (ca.1715-1793) (4),  quien  a raíz de escribir  una disertación  sobre las aguas de dicho balneario- que hasta hoy  permanecía inédita (2)- estimuló y colaboró con el obispo en  llevar a cabo una de las obras sanitarias mas costosas  del momento.

Objetivos

   Nuestra comunicación pretende establecer  un panorama  del estado de la  medicina en la segunda mitad del siglo XVIII, en un provincia española de la que hay muy escasas noticias (3,6,7,8,9 )  dando  a conocer  la vida y la obra del médico de  Baños  en Sierra Alhamilla, Antonio Abellán, cuya  obra  manuscrita , que  se creía perdida: [Noticia de la fuente de aguas termales de Alhamilla],  es el primer texto médico  escrito en  Almería   del que tenemos constancia
   También determinar un punto de encuentro  donde demostrar las relaciones entre la medicina y el poder eclesiástico, por la  influencia que éste poder –tanto en lo  espiritual como en lo  económico- a finales del siglo XVIII-  ejerce en el desarrollo de la sanidad, en  una diócesis española  olvidada.
Antonio Abellán (Guadix, c.1715-Almería, 1793),  médico de cabecera de un  obispo ilustrado
    Fue  médico del Obispo Claudio Sanz y Torres (1704-1779), del deán y del Cabildo catedralicio. Muy Ilustrado y  acreditado en Almería, era socio de la Sociedad Médico-Matritense. (5,16).Juan de Dios y Ayuda  nos informa  que “sus sólidos  dictámenes, mucha instrucción y juicio hicieron justicia en Almería y “que su buena memoria durará largos años” (10).Era clérigo de menores (estado  que le  eximia de impuestos). Uno de los tres facultativos  que según el Catastro de Ensenada, ejercía en la capital en 1751(11,12).Su vida estuvo vinculada a la del  Obispo  a  quien asistió como médico de cabecera en todas sus enfermedades como se expone en un interesante documento: el certificado médico sobre la enfermedad del Obispo antes de su muerte  firmado en marzo de 1779 (13).  Falleció en la ciudad de Almería, en 1793.
[Noticia de la fuente de aguas termales de Alhamilla, por Antonio Abellán. Almería, 5-IV-1772]. (Biblioteca del Palacio Real de Madrid)
 Se trata del  primer texto científico-médico del  que se tiene   constancia material como libro de medicina en Almería desde la época hispanomusulmana. La obra  ha permanecido inédita hasta éste año en que ha sido editada  (2) pero  fue consultada en manuscrito por algunos tratadistas,  que la tuvieron como  muy apreciada y elogiada. (4, 14)
     Tras un preámbulo   y la  descripción del lugar y la naturaleza  de las  aguas termales , recoge el  testimonio de la curación  de más de treinta y cinco enfermos tratados bajo su dirección  de diversas afecciones, llegando a  originales  conclusiones sobre sus observaciones.Argumenta sobre  la patología tratable o no tratable, forma correcta de tomar las aguas y sus  contraindicaciones. Resulta  muy objetivo en sus apreciaciones, nacidas todas de una exhaustiva reflexión sobre  los casos observados y  de su experiencia anterior como médico de baños 
La labor social, benéfica y  sanitaria de un obispo ilustrado: don Claudio Sanz y Torres  y Ruiz de Castañedo (1704-1779)
   Don Claudio  Sanz y Torres, fue un "obispo ilustrado" que tuvo un largo y prolífico pontificado desde su nombramiento en 1761 hasta su fallecimiento en 1779. Su labor marcó muchos aspectos reformadores de la vida de la diócesis almeriense  en el ámbito de la obra hospitalaria, la caridad y la  beneficencia.
   Del clero secular, había  nacido en Torres provincia de Toledo  de familia noble. Cuando siendo canónigo en Osma es preconizado como obispo de Almería, es presentado como "hombre prudente, probo en sus costumbres y hombre de gran experiencia y doctrina"(1).
Cuentan si “hagiógrafos”(1) que su preocupación por los pobres   fue grandísima, aunque  su labor social no fue del todo mérito suyo, sino consecuencia de que  la   diócesis sufre un impulso notable en su economía, obligado por  los  informes generados por la visita  realizada hacia 1775 por Benito Ramón Hermida y Maldonado (15) oidor de la Real Chancillería de Granada, quien vino  a  valorar el estado de sus masas decimales .El  visitador denuncia la labor de todos los obispos  de tres siglos anteriores realizando  una  labor recaudatoria que hace ingresar en  solo dos años, unos tres millones de reales, que son  destinados  a la  construcción y reparación  de numerosos edificios religiosos, y benéficos  que durante  siglos habían sido abandonados.
   Tres aspectos cabría destacar de la labor sanitaria de sus  obras  sociales
a).-Expósitos: El fenómeno de abandono de niños en Almería fue incrementándose hasta tal punto que, dada la falta de pautas que regularan cómo actuar ante esta situación. Sanz y Torres elabora una primera norma  que acabaría  siendo aprobada por Carlos III con el rango de Real Cédula en el año 1763 (16,17). Dicha ley regulaba la asistencia al expósito en torno a una casa-cuna central, situada en la capital de la que dependían otras cinco distribuidas a lo largo de la provincia.
b).- Sanz y Torres  gastó  grandes sumas de dinero en exornar  y alhajar su catedral de Almería o construir grandes obras religiosas como el Santuario del Saliente de Albox (5) .Mandó construir sendos hospitales en Vélez Rubio y Albox (1764) y equipó  en parte el de Santa María Magdalena  en Almería y los de Tíjola (7) y Vélez Blanco, intentando resolver las  irregularidades en el empleo de su dotación,  teniendo  “in mente” además,  fundar unos diez más a lo largo y ancho de toda la provincia
 c ) .- Dada  la gran concurrencia de enfermos que acudían a curarse con sus aguas,  Antonio Abellán estimuló  al obispo - e incluso asesoró a los arquitectos- en llevar a cabo entre 1776 y 1778,   una de las obras sanitarias más significativas del momento: la restauración monumental  de los baños medicinales más valiosos de la provincia en cuyo edificio , el  obispado “gastó grandes sumas de dinero”, habilitándose para poder  tratar decenas de miles de enfermos , durante los siglos XIX y XX. (3) 
Conclusiones   
     La iglesia al menos en la diócesis almeriense durante la segunda mitad de siglo XVIII desarrolló una extensa labor asistencial, con la construcción y mantenimiento de hospitales, hospicios, casas de expósitos y baños medicinales “lo que generaba efectos e influencias que rebasaban ampliamente el campo religioso” (19) Hasta la desamortización de 1798  la mitra almeriense alcanzó un poder económico superior en mucho a la del poder estatal que solo se ocupaba de  la sanidad preventiva. Algún autor (18) lo considera   sin observar para nada la labor de la iglesia. Las Juntas de Sanidad  no se sabe abordaran claramente   temas  de labor caritativa   ni social  y mucho menos ningún programa edificatorio (8,18). La iglesia responde en el ámbito místico-religioso  mientras que los políticos se encuentran adormecidos (19).

BIBLIOGRAFÍA

1.-López Martín, Juan (1999): La Iglesia en Almería y sus obispos.  2 volúmenes. Almería .Diputación Provincial.
2.- García Ramos, José Antonio (2014): El Obispo y su médico. Ediciones Ende. A Coruña
3.-Tapia Garrido, José Ángel (1980): Los Baños de Sierra Alhamilla.  Almería. Editorial Cajal
4.-Abellán Antonio (1772). [Noticia de la fuente de aguas termales de Alhamilla, por Antonio     Abellán. Almería (Manuscrito inédito)
5..-García Campra, Emilio y Gil Albarracín, Antonio (1993): La arquitectura de Albox en el Siglo XVIII. El obispo  almeriense   Sanz y Torres  y el Saliente. Almería .G. B. C, editora.
6..-García Ramos, José Antonio (1998): Médicos almerienses de los siglos XVI al XVIII. Huércal-Overa. Edición del autor.
7-García Ramos, José Antonio (2007): El  libro de juntas  del hospital de Tíjola (1777-1809) y la asistencia hospitalaria  en Almería al final del antiguo régimen. Almansura. Revista Cultural del Valle del Almanzora. Año I, Vol. 1. pp. 44-54.
8--Gómez Díaz, Donato; Gómez Díaz, María José (2003): Almería ante el contagio: la Práctica Sanitaria del Siglo XVIII,  Dynamis: Vol.: 23, pp.221-224.
9.- Gómez Ruiz, Trino (1997): El Hospital de Santa María Magdalena y la casa de Expósitos de Almería. IEA.
10. -Ayuda y Ramos, J. de Dios: (1798): Examen de las aguas medicinales de mas nombre que hay en las  Andalucias. Tomo III,  Madrid. Imp. Real,
11.--Catastro de Ensenada; Almería, 1752. Archivo Histórico Provincial de Almería
12..-Archivo de la Catedral de Almería, Lib.32, Fol., 180 Vto.
13.- A. H. N. Consejos: lega.15.543.d.2.S. F.1779-5-12-Almería
14.-Solsona,  Juan Bautista (1822) Disertación físico-química y análisis de las aguas minerales  de Sierra Alhamilla en el reino de Granada.  Almería. Oficina de José Santamaría.
15.-Gil Albarracín, Antonio (2007): Ilustración e Iglesia. La visita de Benito Ramón de Hermida al Obispado de Almería. Barcelona: GBG,

16.-Real cedula, aprobando S.M. la ordenza, que inserta formada, por don Claudio Sanz y Torres... para el mejor gobierno  y administración de el ramo de niños...1763 – Archivo Histórico de la Diputación de Almería

17.- Fernández Ortega, Antonio (1984-85): La ordenanza para la administración del ramo de los niños expósitos de la Diócesis de Almería del año 1763. Chronica Nova 14, 1984-85, 147-159
18.-Rodríguez Ocaña. Esteban (1988): “El resguardo de la salud. Organización sanitaria española       en  el siglo XVIII.” Dynamis, Vol. 7-8,  pp.145-170
19,-García Jiménez, Modesto (2003): Proceso de reificación histórico-sociales: secularismo y espiritualidad. Tesis doctoral. Murcia. UCAM.