LOS
PUEBLOS SIN RELIGIÓN NO SON SOCIEDAD,
SON, CONJUNTO DE BESTIAS DE CATEGORÍAS DISTINTAS
(A
PROPOSITO DE LA RELIGIÓN ARGÁRICA)
Vivos
y muertos compartían un mismo espacio físico en los poblados argáricos. “Desarrollaron –dice el profesor Molina– un sentimiento religioso mucho más
elaborado que sus antepasados de la Edad del Cobre. Aquellas gentes no sólo
rendían a sus difuntos cultos rituales relacionados con las creencias relativas
al más allá, sino que también llegaban a venerarlos como antepasados notables,
manteniéndolos en el propio hogar.”
Quizás esta costumbre
se instauró para simbolizar de una manera directa la ascendencia que algunos
vivos mostraban con orgullo y para fijar la relación de poder, sobre todo
cuando las familias forman parte de la élite y se transmiten por herencia sus
categorías social y económica. Recordemos que la argárica era una cultura que
destaca por su acusada jerarquización social, como veremos más adelante
(Chapman et al., 1987: 18).
En los ritos de la muerte
se llevan a cabo ofrendas de animales (bóvidos, équidos y ovicápridos) según la
categoría social de muerto.
Se ofrecen en elementos
minerales de cerámica: vasos y copas en los que se han depositado plantas aromáticas (tomillo,
romero, cantueso...) o psicoactivas (adormidera, belladona, beleño...), perfumes o bebidas espirituosas (vino, cerveza,
hidromiel…).
El
objeto de las ofrendas funerarias es la esperanza sn la resurrección y tras esta al fallecido no ha de faltarle
comida para el tránsito o las primeras etapas de la resurrección, que constatan en determinados casos el acompañamiento de alimentos
para sustentar al muerto en el viaje —quizás con un carácter transitorio meramente—al
más allá;
EL
RITUALFUNERARIO PUEDE TENER UNA INTERPRETACIÓN:
EL ACOMPAÑAR AL
DIFUNTO TANTO DE VASIJAS CON ALIMENTOS ARMAS ACEITES ETC. ES PARA QUE ESTOS LOS
UTILICEN EN EL MOMENTO DE LA RESURRECCCION-O SEA , QUE EL
PERMANECER ENTERRADO EN UN HECHO DE
TRASCENDENCIA PASAJERA